Las ruedas de tu bicicleta deben soportarte a ti, a la bicicleta y a menudo un equipaje o compras: por eso, la presión del aire no debe ser demasiado baja. Si conduces demasiado tiempo con ruedas demasiado poco infladas, el desgaste se intensifica. Además, así se avanza con dificultad. Por supuesto, tampoco hay que llenar las ruedas con demasiado aire. Nuestro consejo: comprueba la presión de los neumáticos mensualmente y, en caso necesario, ínflalos.

Con una eBike te pones en marcha de inmediato, ya que con la asistencia del motor eléctrico aceleras más rápido que con una bicicleta convencional. Aún más importante es un freno que funcione bien. El mantenimiento y la reparación de los frenos de disco y de buje se dejan en manos de expertos, pero de los pequeños problemas del freno de llanta puedes ocuparte tú. Descubre aquí sencillos trucos con los que comprobar y ajustar los frenos de las bicicletas.